19-11-2010

Teoría: Origen del urbanismo

por JcScG


No es posible comprender las ciudades contemporáneas, sin hacer referencia a las profundas transformaciones económicas que han experimentado las sociedades humanas desde la revolución industrial en adelante. En el mundo anglosajón la planificación urbana y el urbanismo como disciplina, nacen como respuesta a los graves problemas sociales y urbanos de las ciudades portuarias e industriales, justo después de la Gran Depresión de 1873-1890. Hecho no casual, considerando que tal como es posible hacer una correlación entre los grandes cambios económicos ocurridos en el mundo y los procesos de transformación (física y social) de las ciudades, también es posible relacionarlos con las transformaciones en los modos de “gobernar” tales cambios. Los cuales podrían ser agrupados en tres grandes momentos de la historia.

Un primer momento, que bien podría ser denominado como “post liberal” o de “reformismo social”, iría desde el nacimiento de la disciplina hasta la crisis de 1929, intenta responder a las señas inequívocas de la crisis del liberalismo económico, exigiendo cada vez una mayor intervención de parte del Estado, para enfrentar los desiquilibrios sociales y los efectos del deterioro de las ciudades, que comenzaban a obstaculizar el crecimiento económico. En este periodo, en el cual se masifica la idea de que el “interés público” debe ser perseguido por el Estado, se institucionaliza la planificación urbana, emergiendo respuestas como la “ciudad jardín”, la “higiene social”, la “zonificación” o la “surburbanización”, entre muchas otras; cimentándose de paso las bases teóricas del urbanismo.

Un segundo momento, “planificador” o “desarrollista”, corresponde al período que va desde la crisis de 1929 hasta la crisis del fordismo en los años 60s y 70s, el cual se caracteriza por la fuerte presencia del Estado en la planificación de la economía y la sociedad. Si bien, a nivel teórico puede concebirse como la continuación natural de las preocupaciones que dieron nacimiento a la disciplina, en este periodo se desprende de las perspectivas demasiado liberales e individualistas, encontrando en la Gran Depresión de los años 30s la justificación necesaria para “corregir” las inequidades del libre mercado por medio de la acción estatal. Durante este período, fuertemente influenciado por las ideas de Keynes(1), se sientan las bases de un nuevo sistema monetario mundial fundado en un mayor proteccionismo, se promueven políticas de desarrollo e industrialización impulsadas por el Estado y se desarrolla la disciplina urbanística como una herramienta fundamental en este proceso.


Sin embargo, la crisis económica de fines de los años 60s y comienzos de los 70s(2), que derivó en una progresiva desindustrialización de las ciudades europeas y norteamericanas, puso en entredicho en todo el mundo los modelos de planificación de corte keynesiano. Dando pie a un tercer momento, que bien podría denominarse “pos-moderno”, dada la emergencia de una pluralidad de enfoques y la yuxtaposición de disciplinas, en un horizonte donde todo parece gozar del mismo status de legitimidad; o bien “neo-liberal”, dada la naturaleza de las nuevas políticas económicas(3) que están a la base de las nuevas políticas urbanas. Independiente de que las respuestas sean “reformistas” o "conservadoras”, en este periodo se tiende a reciclar buena parte de los constructos teóricos, dispositivos técnicos e instrumentos anteriores. Una de las características de esta fase es que el vínculo entre las transformaciones en los estados (que pierden relevancia), en la economía (que se desvincula del territorio) y en la sociedad (que se “globaliza”), debilita el modelo de organización en base a estados-nacionales, abríendo nuevas posibilidades para dimensiones infra-nacionales.

Notas:
1. Ver, John Maynard Keynes (1936),The General Theory of Employment, Interest, and Money”, Macmillan, Cambridge University Press.
2. Normalmente identificada con la caída de los valores bursátiles de 1969, el fin de los acuerdos Bretton-Wood en 1971 y la crisis del precio del petróleo de 1973.

3. Cuyos ejes centrales son la desregulación, la privatización, la flexibilización del mercado del trabajo y la descentralización espacial.

Imágenes:

1. "The Strike" (1886), Robert Koehler.
2. Refinería de Petróleo ENI de Gela (Sicilia), construida como parte de las políticas de desarrollo promovidas por el Estado, de inspiración keynesiana, en Italia.
3. Población en Ciudad del Cabo, Sud África. Foto de Theo Scheffle
r.

Referencias:

Bairoch, Paul (1996), Cinq millénaire de croissance urbane, en I Sachs - compilador -, Quelles villes, pour quel développement?, Puf, Parigi. pp.17-60.

Benevolo, Leonardo (1996), “La città nella storia d'Europa”, Laterza, Roma-Bari.

Hall, Peter (1996), Las ciudades del mañana. Historia del urbanismo en el siglo XX, Ed. del Serbal, Barcelona.

Le Galès, Patrik (2006), Le città europee. Società urbane, globalizzazione, governo locale, Il Mulino, Bologna.

Plaisant, Alessandro (2009), La partecipazione nel governo delle trasformazioni del territorio. Strumenti innovativi per costruire la città dei diritti, Franco Angeli, Milán.

Swyngedouw, Eirk; Moulaert, Frank & Rodríguez, Arantxa (2002), Neoliberal urbanization in Europe: Large-Scale Urban Development Projects and the New Urban Policy, en Neil Brenner & Neil Theodor, Spaces of neoliberalism: urban restructuring in North America and Western Europe, Blackwell, Oxford. pp.195-229.
Véron, Jacques (2008), L'urbanizzazione del mondo, Il Mulino, Bologna.
Vicari Haddock, Serena (2004), La città contemporanea, Il Mulino, Bologna.

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